Aprende a reconocer cuándo tu perro siente dolor

Muchas veces nos preguntamos si nuestro perrito siente dolor, y esa es una de las preguntas mas difíciles de responder. La manifestación del dolor en los perros puede variar mucho de unos animalitos a otros, al igual que en las personas, ya que depende de la intensidad del dolor, la personalidad del perro ( están los “quejicas” y los que van de muy “duros”), de la zona que les afecte, etc,

Resulta fácil identificar cuando un perro cojea de una pata, eso quiere decir que tiene un problema en esa zona y por tanto, suele haber dolor asociado. Si se sacude mucho la cabeza o se rasca mucho un oído, también nos indica que puede tener otitis, y por tanto , malestar en esa zona. Pero ¿qué pasa cuando no sabemos qué tiene nuestro perro pero nos damos cuenta que “ALGO LE PASA“?  Por tanto, vamos a  explicar una serie de signos que os puedan orientar para reconocer que nuestra mascota tiene dolor .

• Cambios de conducta: lo primero en que debemos fijarnos es en que, normalmente, se moverán menos, muchas veces no vienen a saludarnos cuando entramos en casa, o si lo hacen es a desgana, con movimientos mas lentos . Interactúan menos con el propietario, yendo mas rápidamente a su canasto. Por el contrario, también hay perros que delante del dolor responden con mas nerviosismo de lo habitual, deambulando por la casa de manera inquieta…

•  Hábitos de alimentación: Suelen comer  menos, o incluso no comer y no beber. A veces no quieren “chuches” ni ese “manjar” que siempre les ha entusiasmado. No se acercan a la mesa cuando estamos  comiendo si están  acostumbrados a hacerlo…

•  Alteración respiratoria: Si sienten un dolor  muy  intenso, algunos respiran mas agitadamente , (si hay fiebre o están en un ambiente muy caluroso también lo hacen, ya que es su manera de refrigerarse). Hay signos mas sutiles, por ejemplo una respiración mas abdominal puede ser a veces signo de dolor, pero también puede indicar  otras cosas).

•  Alteraciones posturales: Los cambios  posturales en ocasiones también nos indican la existencia de dolor; por ejemplo mueven menos la cola o la llevan más caída, posición de “rezo” (los miembros traseros levantados y los delanteros flexionados), torso arqueado, etc.

• Otros comportamientos: Estos signos o comportamientos son específicos de cada perro y tienen mucho que ver con cambios en su manera de ser habitual. Por ejemplo, la mirada puede darnos información sobre el estado de nuestra mascota; en algunas ocasiones se puede relajar el tercer párpado, dando a nuestra mascota una expresión de tristeza. Otros  pueden presentar agresividad con otros perros o incluso con los propietarios. Hay mascotas que siguen a todas partes a sus dueños como buscando “protección”.

Esperamos que con esta pequeña guía os resulte mas fácil identificar los signos de dolor  inespecífico en vuestra mascota y os dejamos con nuestra recomendación: al primer síntoma “extraño” debemos acudir a la clínica veterinaria para una valoración correcta.

Nos encantaría saber cómo has detectado que tu mascota sentía dolor en otras ocasiones. Déjanos tus comentarios.